Estaba yo aquí, tratando de dormir, cuando he empezado a divagar sobre mis nuevos propósitos para 2016. Que si publicar una vez al día en el blog, aunque sea una chorrada diminuta ya que la intención al crearlo fue tener un miniblog para escribir desde el móvil... También tratar de aprender una palabra nueva cada día para así a final de año tener 366 palabras nuevas en mi vocabulario (es año bisiesto), y cada una de las palabras publicarlas en twitter. Cuantos libros plantearme leer, porque ya es obvio que no llegaré a los 55 de este año. Encontrar un nuevo empleo. Estudiar. Ser más amable con la gente buena. Cultivar mi memoria, cosa que cada vez me preocupa más. Hacer más ejercicio y no ser tan pasiva. Tratar de escribir ese libro que siempre digo que publicaré aunque sea para mí.
En definitiva, estaba pensando en muchas cosas, pero sobre todo, y la que me ha traído a escribir aquí, ¿porqué tengo que empezar dichos propósitos con el año nuevo? ¿porqué no puedo empezar ya a aplicarme mis buenas costumbres? ¿Porqué no empezar ya mis nuevas rutinas? Yo no lo entiendo, eso de año nuevo, vida nueva.... Prefiero empezar a trabajar en mi felicidad desde hoy, y no a partir del 1 de enero de 2016, porque es ahora cuando necesito sentarme a pensar y a saber que quiero hacer con mi vida, sin excusas, sin pararme, sin vaguería, solo trabajando por y para mí. Por mis sueños, para mi bienestar mental. Así que... Nada, aquí mi primer post escrito desde el móvil, obviamente parecerán (o más bien serán) muchos más cortos que si tecleo con el ordenador.
Mañana seguiré con el blog, porque es una rutina que me quiero marcar, el escribir aunque sea una frase en mi pequeño mundo, en "my world".
Besos
No hay comentarios:
Publicar un comentario